¡Bienvenido a mi mercadillo! Aquí podrás encontrar palabras y expresiones salmantinas que la cultura mal entendida arrinconó por catetas. Me parece tan impropio de los que tenemos el don de hablar avergonzarnos de ellas, que hoy, para ponerlas en el lugar que les corresponde, abro este mercadillo. ¿Te gustaría ayudarme? Espero tu visita y, si quieres traerme un regalo, ya sabes lo que me gusta: una cateta de tu tierra. Seguro que tienes muchas. Y antes de irte, ojea mi periódico.
lunes, 8 de octubre de 2012
Guipar
¡Hola! ¿Me prestas cinco minutos? Me sobran tres para presentarte una palabra que a buen seguro te resulta familiar. Se trata de la palabra guipar: ver, descubrir, percivir algo que nos quieren ocultar. ¿A que aunque te resulta cateta no te resulta desconocida? Naturalmente. Me atrevo a decir que esta palabra se ha utilizado en todos los pueblos de España pero merece un hueco en mi mercadillo porque o mucho me equivoco o en la sierra salmantina se utilizó más que en otras zonas. Fíjate en estas frases:
“Guardé bien la tarta de cumpleaños pero al final me la guiparon antes de tiempo y tuve que sacarla”.
“Guarda bien los regalos de reyes si no quieres que los chicos te los guipen antes de tiempo”.
“No me escondas los bombones que ya te los he guipado”.
Pues bien, si la conoces, ¡anímate a usarla! Es preciosa.
Cateta de Valdehúncar (Cáceres). Tupir o tupirse: hartarse a comer. Tupitada: el hartazgo.
ResponderEliminarPrueba.
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