sábado, 18 de noviembre de 2017

Patochada

¡Hola! Acabo de oír una catetilla que figura en mi archivo y aquí me tienes, abriendo el mercadillo para dejarla. Se trata de la palabra patochada, y para los más descuidados, patochá. Quiere decir despropósito, incoherencia, metedura de pata. Fíjate en los ejemplos:
     Ayer hablé con Pilar, le pregunté si habías regresado del viaje y me saltó con una patochada de las suyas. Lo mejor es no hacerle caso.
     Para mí que Jaime no anda muy bien; tan pronto te cuenta su vida sin preguntarle, como le preguntas por algo y te salta con una patochada.
     Si quieres oír patochadas, vete a la reunión de vecinos, porque si uno mete una pata, el otro mete las dos.
     Saluditos.

miércoles, 15 de noviembre de 2017

No estar muy católico

¡Hola” De nuevo entro en el mercadillo, con una simpatiquísima catetilla: “No estar muy católico”, es decir, encontrarse algo mal de salud, sufrir algún malestar. Seguro que todavía la utiliza alguien.

     Desconozco el origen de esta expresión. ¿Alguien lo sabe? Se me ocurre pensar que a lo mejor tenga que ver con los tiempos de la Inquisición, en que lo primero era ser o declararse muy católico, por si las moscas. La forma negativa no estar o no encontrarse muy católico lo que hace es reforzar la idea de que lo ideal era estar o ser muy católico.

    Cuentan que en uno de nuestros pueblos, supongo que pasaría en muchos, el cura, en cierta ocasión, fue a visitar a un enfermo, y al preguntarle cómo se encontraba, el enfermo dijo: “Pues ya ve padre, no estoy mu católico”. A lo que el cura respondió: “No diga eso hombre de Dios. Querrá usted decir que no está mu bien, pero que no está mu católico…”
    Cosas que pasan.

     Saluditos.

domingo, 12 de noviembre de 2017

Bobanco

¡Hola! Bienvenido al mercadillo. La nueva catetilla es muy simple: bobanco. Se usaba en no pocos pueblos de la provincia para llamar a alguien bobo de forma más cariñosa.
     Saluditos.